Esculturas de Cristo

CRISTO CRUCIFICADO

Imagen con gran mérito que se encuentra en la sacristía de la parroquia, sobre un doselete de terciopelo carmesí con marco de madera sobredorada. Es una talla del s. XVIII de la escuela gaditana de origen genovés. Es de madera tallada y policromada. Un cristo vivo que representa alguna de las Siete Palabras en la cruz. Monta el pie izquierdo sobre el derecho. Restaurado en 2006 por Juan Pérez Bey.

VÍA-CRUCIS

Las catorce estaciones de este Vía Crucis fueron adquiridas a los talleres de Claudio Rius Garrich en 1918, por el Párroco don Francisco Antigas. Se trata de catorce altorrelieves de madera policromada que representan con gran minuciosidad las escenas de la Pasión y Muerte de Cristo. Están enmarcados por dos columnas y sobre ellas un arco rematado por una cruz. Bajo el pedestal que lo sustenta figura en número romano la estación a la que pertenece. Están ubicadas en los frontispicios del interior del templo, fueron retiradas con la reforma de 1966 y sustituidas por unas más toscas en forja negra. En 1986, después de su limpieza y restauración por A. Berraquero, se devuelven otra vez a su lugar de origen donde permanecen hoy día.

Jesús Cautivo y Rescatado

(CRISTO DE MEDINACELI)


Esta imagen fue donada a la parroquia por doña María Rodríguez Guerra, viuda de don José Lora Ristori, tras propagarse en España la devoción a Jesús de Medinaceli. Es una talla completa de pasta de cartón madera y policromada. Reproduce a escala menor la imagen del milagroso Cristo de Medinaceli de la iglesia de los capuchinos de Madrid. Se bendijo en 1927 y llegó a tener su propia capilla, más tarde se retiró del culto en la reforma de 1966 y recuperada años más tarde para situarla en una sencilla repisa en la última columna de la nave del Evangelio, cerca del altar de la Caridad, donde hoy día permanece.

SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Esta imagen se adquiere en 1929 en los talleres de Olot, tras la consagración del templo en la cuaresma de ese mismo año al Corazón de Jesús. Se entronizó bajo templete en el altar mayor, presidiéndolo casi cuarenta años. Es de pasta de cartón madera y policromada al óleo. La iconografía simboliza el amor divino.

Tras la reforma de 1966, pasa a ser colocada en una sencilla repisa en la nave de la Epístola, donde permanece en la actualidad.

CRISTO YACENTE

Talla labrada en el año 1930 por Antonio Velázquez Pedemonte, torpedista de la Armada y escultor aficionado. Es una imagen de madera policromada de 180 cm. Representa al Señor muerto, cubierto por un paño de pureza mostrando las llagas de los clavos en manos y pies así como las señales de la corona de espinas. La talla si bien es muy realista se considera de regular mérito artístico.

Se veneró desde 1935 en la que fuera la gruta de la Virgen de Lourdes (hoy capilla de Santa Elena), se retiró del culto en 1966 para recuperarse posteriormente durante el curato de don Javier Orpinell. En la actualidad se venera en su primitivo lugar en una sencilla urna.

CRISTO CRUCIFICADO

En la reforma de 1966, tras adelantar el presbiterio a su ubicación actual, una nueva imagen de Cristo Crucificado se sitúa suspendido de la bóveda. Esta talla, sin ningún título ni advocación es de autor desconocido, de madera policromada y de 180 cm. Muestra a Cristo en la cruz, con la cabeza inclinada a la derecha, paño de pureza de amplio vuelo, clavado con tres clavos y montando el pie derecho sobre el izquierdo.

En años posteriores el Cristo cambió su ubicación y se colocó sobre el cuadro de la Inmaculada de Maella, presidiendo la nave central, como lo hallamos en la actualidad.

Cristo suspendido de la bóveda


Esculturas de la Virgen María


NUESTRA SEÑORA DE LOS REMEDIOS

Fue la protectora del primitivo Hospicio de los franciscanos de la Real Isla de León y al establecerse la parroquia en 1765 sigue siendo la titular de la misma. El motivo era que esta advocación mariana es la titular del Convento de San Francisco de Cádiz, a cuya orden pertenecían los .franciscanos asentados en la ciudad. La primitiva imagen, atribuida a Clemente de Torres, fue donada al Hospicio en 1744 por un comerciante de la capital para que presidiera el altar mayor del templo que se estaba construyendo. La Parroquia Castrense se titulo oficialmente "Nuestra Señora de los Remedios" y presidió su altar mayor durante todo el s. XIX.

Se cree que 1929 cuando se traslada el presbiterio, la imagen de esta Virgen pasa al lateral de la nave del Evangelio. En 1966 con la gran reforma fue retirada del culto. Finalmente la imagen muy deteriorada es recuperada por la Hermandad de la Caridad para cultos internos y restaurada por Juan Pérez Bey. En 1999 la Hermandad manda tallar otra efigie con el mismo título mariano, siendo la antigua depositada en dependencias interiores de la Parroquia.

MARÍA SANTÍSIMA DE LA ESPERANZA

(antes Virgen de los Dolores)

Pertenece a la Hermandad de la Expiración.

INMACULADA CONCEPCIÓN: "LA REPATRIADA"

Esta imagen procede del arsenal naval de La Habana (Cuba). Cuando España perdió la guerra de 1898 contra los Estados Unidos de América y tuvo que abandonar la isla caribeña, la efigie fue sacada del arsenal habanero y embarcada en el buque de guerra “Magallanes”, del que era comandante Vicente Pérez Andújar. El “Magallanes” formaba parte de la última flotilla de la Armada española que abandonó Cuba, la cual arribó al puerto de Cádiz en abril de 1899.

Pérez Andújar entregó entonces la imagen de la Inmaculada cubana al párroco del Departamento Marítimo de Cádiz, con capital en San Fernando, para que fuera venerada en el templo parroquial castrense de esta localidad. Desde entonces, la imagen procedente de La Habana se venera en la Parroquia de San Francisco. Y desde entonces es conocida como “ La Repatriada”, porque había sido devuelta a la patria.

Se trata de una talla de madera estofada policromada, de autor anónimo, del siglo XIX. Se desconoce si fue enviada a Cuba desde España o fue tallada por un artista cubano. La imagen está de pie sobre un orbe en el que hay una cartela con la siguiente inscripción: "Del Arsenal de La Habana / Llegó a España / el 1º de abril / de / 1899". Tras la reforma de 1966 no fue retirada del culto, pero estuvo situada en diversos puntos del templo. Hoy se encuentra en una repisa en la nave del Evangelio.

En 2008 fue limpiada en profundidad por el Manuel Jesús Trujillo.

VIRGEN DEL CARMEN

Desde el nombramiento de la Virgen del Carmen como patrona de la Marina en 1901, se potencian sus cultos y se adquiere una imagen de esta advocación mariana a los talleres de Olot. En 1909 se bendice la imagen de la Virgen del Carmen y se sitúa en un testero de la capilla del Sagrario. Con la reforma de 1966 la Virgen del Carmen sigue siendo venerada en su misma ubicación pero se retira el altar neogótico que la albergaba y se coloca en una sencilla hornacina, como vemos en la actualidad.

La imagen es una talla completa de pasta de cartón madera y pintada al óleo. Viste el hábito carmelitano: escapulario y hábito marrones y capa blanca que recoge con su mano izquierda. En su mano derecha porta cetro y el Santo Escapulario. El brazo izquierdo sostiene al Niño Jesús que tienen los bracitos extendidos en cruz, sosteniendo en su mano izquierda el Escapulario carmelitano.

La corona que luce la Virgen es de 2012, es de plata labrada por Emilio Méndez. Las potencias del Niño Jesús son del taller de Antonio Santos.

El conjunto fue restaurado por Eduardo Martínez Pérez en 2011.

VIRGEN DE MONTSERRAT

Durante la dictadura de Primo de Rivera, se extiende por España el somatén (cuerpo armado civil para ayudar a mantener el orden público) de origen catalán y que tenía como patrona a la Virgen de Montserrat (primera coronación canónica en España).

En San Fernando el somatén también tuvo a la Virgen de Montserrat como patrona y esta imagen fue regalada en 1926 por el alcalde Sr. Vázquez Delgado. Es un simulacro de la imagen original de "La Moreneta".

Tenía sus cultos el 27 de abril desde 1924 y cuando se disolvieron los somatenes y cayó la dictadura primoriverista, cesaron los cultos.

Es una imagen de poco valor artístico, de cartón madera policromada al óleo de 82 x 48 cm. Estuvo expuesta a la veneración pública hasta la reforma del 66, hoy la podemos contemplar en la Sacristía de la Parroquia, tras haber sido restaurada hace poco tiempo.



Esculturas de Santos

ANGELES LAMPAREROS

Como tradición católica en los templos encontramos los ángeles lampareros, cuya función era la de iluminar el altar por ambos lados. Estas figuras de madera policromada y de autor anónimo estaban ubicadas iluminando el altar mayor y podrían datarse de la primera época del templo, si bien también pudieron ser adquiridos con la reforma del presbiterio en 1929. Con la reforma del 66 fueron retirados del culto y con el curato de D. José Barreiro (1987/89) fueron ubicados en la capilla del Sagrario, sujetando el cordón rojo de la lámpara que ilumina el altar.

SAN JOSÉ CON EL NIÑO JESÚS

Esta imagen josefina data de finales del s. XVIII, de autor anónimo y que debió ser costeada por el Marqués de Casa Tabares para la capilla que él mismo solicitó a los franciscanos y que igualmente costearía para utilizarla como panteón familiar y colocar aquí la mencionada imagen.

Es una talla completa de madera policromada oscurecida, viste túnica verdosa y gran manto pardo. Luce aureola en plata. En su brazo izquierdo porta vara florida y su brazo siniestro porta al Niño Jesús, de gran mérito artístico, alzando su bracito izquierdo. Antiguamente portaba en el bracito izquierdo cetro y orbe en el derecho. Las potencias del Niño fueron labradas en 2008 en el taller de Antonio Santos.

Estuvo durante todo el s. XIX presidiendo la nave de la Epístola, tras la reforma del 66, se situó en una sencilla repisa en la nave lateral. Hoy la podemos contemplar en una hornacina abierta junto a la pared lateral de la capilla del Sagrario.

SAN JUAN BAUTISTA

La imagen representa a San Juan Bautista, como profeta y predicador en el desierto, vestido con piel de camello y capa escarlata, como símbolo de su martirio. El brazo derecho porta un bastón de caminante rematado en cruz; el brazo izquierdo acaricia un cordero, símbolo de Cristo, que fue anunciado por él y saludado con esta frase: "He aquí el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo".

La talla completa que es policromada, realizada en madera de cedro, con ojos de cristal y dientes de marfil, mide 1.80 cm y está constatada como obra de José de Cirartegui-Saralegui (escultor del Cristo de la Expiración) y que la realizó en 1795 en los talleres del Arsenal de la Carraca donde estaba empleado, siendo costeada por Manuel de Caviedes, acaudalado comerciante y miembro de la Hermandad de la Expiración.

Se talló para presidir el Sagrario aunque no sabemos desde cuando pasó al Baptisterio, si bien permaneció mucho tiempo retirada del culto, se restauró en 2011 por Eduardo Martínez y Antonio Sánchez y hoy la podemos venerar de nuevo, con toda lógica litúrgica, en la capilla Bautismal.

SAN FRANCISCO DE ASÍS

La imagen de San Francisco de Asís ha estado siempre presente en la Parroquia, incluso llegaron a coexistir hasta tres imágenes diferentes distribuidas en distintos altares. Esto no es de extrañar ya que es el fundador de la orden de los franciscanos que regentaron la primera Iglesia-Hospicio.

Estas primeras tallas del Santo que se conocen están a día de hoy muy deterioradas, encontrándose en el Museo Naval a la espera de su restauración.

La imagen que nos acompaña en la actualidad, es una talla de candelero de vestir, con cabeza y manos de madera policromada. Luce el hábito de la Orden franciscana con capuchón y cordón blanco con nudos ceñido a la cintura. Data, según inventario, de 1941. Tras las reformas de 1966 se retiró del culto y pasó al Museo Naval de la ciudad. En el año 1996 es restaurada por Salvador (Boro) García Piñero, y recuperada de nuevo para la Parroquia ese mismo año, siendo párroco don Florencio Casamayor.

Cada año se celebra el Triduo en Honor y Gloria a San Francisco de Asís en la fecha de su onomástica del 2 al 4 de octubre.


SAN JUDAS TADEO

La imagen de San Judas Tadeo, considerado por la Iglesia abogado para las causas difíciles y desesperadas, goza de gran devoción entre los fieles de nuestra Parroquia. Por ello se adquiere en los últimos años a talleres industriales, una talla de el Santo Apóstol que no tiene valor artístico pero si devocional. El Santo es representado con túnica blanca y manto rojo. Lleva aureola dorada y porta libro y hacha referente al objeto del martirio.

Todos los miércoles del año, la misa de las 11:30 horas se realiza en Honor de San Judas Tadeo. Al término de la Misa, se pide los favores y las gracias a ésta Bendita Imagen .

Con motivo de su Festividad el 28 de octubre, los días previos se celebra anualmente un Solemne Triduo en Honor y Gloria a San Judas Tadeo durante la misa de las 11:30 horas. Se culmina el mismo el día 28 de Octubre con una Misa Solemne.


Esculturas de Santas


SANTA BÁRBARA

Esta imagen fue labrada por Francesco Galleano (escultor gaditano de origen genovés) en 1737, a petición de la Hermandad de Santa Bárbara integrada por militares del cuerpo de Artillería, en aquel entonces establecida en el Convento de la Candelaria de Cádiz. Con motivo del asentamiento de la Armada española en la Real Isla de León, la Hermandad consigue trasladar a la imagen hasta la iglesia del Carmen de esta Villa en 1769. Santa Bárbara sigue los pasos de su Hermandad y cuando nuestra Parroquia adquiere la condición de Iglesia Castrense, su Hermandad se traslada hasta aquí y en 1785 y hasta 1966 llega a tener su propio altar a los pies de la nave de la Epístola.

Con la reforma de 1966 fue retirada del culto. Entre 2007 y 2009 fue restaurada por Eduardo Martínez y hoy día puede venerarse en una capilla lateral de la nave del Evangelio, frente a Santa Elena.

Es una de las más antiguas imágenes de la Parroquia y de mayor valor artístico junto con el Cristo de la Expiración.

Representa a la virgen y mártir de Nicomedia (Asía Menor) del s. IV, que según narra una antigua tradición, cuenta que era hija de un hombre rudo llamado Dióscoro. Como ella no quería creer en los ídolos paganos de su padre, éste la encerró en una torre que tenía dos ventanas, pero la santa mandó a los obreros a que añadieran una tercera ventana para acordarse de la Santísima Trinidad. Este acto enfureció más a su incrédulo padre, quien permitió que la martirizaran cortándole la cabeza con una espada.

La misma tradición señala además, que cuando Dióscoro bajaba del monte donde habían matado a su hija, le cayó un rayo y lo mató, y es por este hecho, que muchas personas rezan a la santa para pedir su intersección y verse libre de los rayos de las tormentas. En su sepulcro se obraron muchos milagros.

SANTA LUCIA

La imagen de Santa Lucía se encuentra en nuestra Parroquia desde los años 50. Representa a la joven virgen de Sicilia que fue martirizada en el s. IV, según la tradición se dice que en su martirio le sacaron los ojos, por ello se la considera patrona de los ciegos.

Llegó a tener hermandad propia y la ONCE con motivo de su festividad el 13 de diciembre, celebraba sus cultos en la Parroquia. Fue retirada del culto con la reforma de 1966, pero fue recuperada hace unos años y se venera en una repisa en la última columna de la nave de la Epístola, frente al Baptisterio.

La efigie es de cartón madera policromada, procedente de talleres industriales. Representa a la joven con túnica verde y manto rojo veneciano. Luce corona de flores en la cabeza y los atributos de la palma del martirio y bandeja con los ojos.

SANTA TERESITA DEL NIÑO JESUS

Fue carmelita descalza francesa, canonizada y nombrada patrona de las misiones católicas por Pío XI. A raíz de su canonización en 1925 se extiende su devoción. En la Parroquia se tiene constancia de ella desde 196o, situándola en la Sacristía. Se retiró del culto en el 66 y hoy día vuelve a estar de nuevo en la Sacristía.

La imagen es de cartón madera policromada, procedente de talleres industriales. Representa a una joven con el hábito de su orden y portando como atributos un ramo de flores y un crucifijo que no conserva. Necesita ser restaurada.